Sin duda alguna, uno de los medios publicitarios más tradicionales es a través de la publicidad impresa. ¿Quién no ha tomado un bolígrafo en la mano y a redondeado alguna oferta en un periódico? Ese es el objetivo de los anuncios publicitarios, captar la atención del lector y crear un nuevo cliente.
Veamos un poco más en profundidad cómo es este tipo de publicidad y qué puede hacer por nosotros a continuación…
Qué es la Publicidad Impresa
La publicidad impresa describe la publicidad en un medio impreso como un periódico, una revista o una publicación comercial. Abarca desde medios de comunicación con una base de lectores muy amplia, como un gran periódico o revista nacional, hasta medios de comunicación más específicos, como periódicos locales y revistas comerciales sobre temas muy especializados.
Una forma de publicidad en la prensa o diarios son los anuncios clasificados, que permite a los particulares o a las empresas comprar un pequeño espacio publicitario con un objetivo concreto por una tarifa baja para anunciar un producto o servicio. Otra forma de publicidad en la prensa es el anuncio a toda página, que es un anuncio más grande (puede incluir fotografías) que suele aparecer en la sección de artículos de un periódico.
Tipos de publicidad impresa
Publicidad en periódicos, diarios y prensa
Un anuncio en la prensa local o periódico de tirada a nivel regional nos puede proporcionar una gran visibilidad y tomar ventaja sobre nuestra competencia.
Publicidad en revistas
Publicar un anuncio en revistas de temática apropiada y especializadas con relación a nuestra actividad comercial puede resultar un gran acierto de cara a promocionar o dar a conocer nuestra marca y/o servicios.
Publicidad en folletos o catálogos
Un pequeño anuncio en un folleto publicitario puede resultar de gran utilidad y obterner un gran éxito de venta, a través de una oferta o servicio relacionada con la temática del folleto o catálogo.
Flyers publicitarios
Resultan especialmente efectivos para eventos puntuales o para «invitar» a los clientes a visitar nuestro negocio o local, pudiéndose repartir en la calle a través de un promotor, así como repartirlos por otras tiendas cercanas o disponerlos en mostradores con la intención de que el cliente pueda obtener uno con toda la información necesaria para que conozca nuestros servicios.